miércoles, 17 de abril de 2013

99 a 1


Tengo que hacer honor a mi esencia. Tengo que arriesgarme. Tengo que vivir al límite. Tengo que apostar todo a una carta. Tengo que ser yo misma. Tengo que disfrutar. Tengo que sentir la paz propia de la acción. Tengo que intentarlo. Tengo que luchar. Tengo que lograrlo.

La vida no se está desarrollando de la forma en la que pensaba. Debo esforzarme más para obtener el resultado deseado.

Por ello, como lo importante es que cada cual sea feliz, he tomado una decisión.

Mi decisión hace honor a mi persona. Está llena de vida, de ilusión, de ganas de vivir, de compromiso, de felicidad, de alegría, de reflexión, de madurez llena de mí misma.

Cuando he de tomar una decisión importante en mi vida necesito darme tiempo. Es una reacción madura, enfrentarse a la vida tras reflexionar y valorar lo que tienes, lo que sientes, lo que quieres y lo que puedes obtener.

Haciendo honor a mi misma tan sólo puedo decir que aunque me haya tomado tiempo en la decisión ha sido fruto de la espera. No he evaluado el mundo que me rodea, no. Simplemente he disfrutado de mi mundo, he escuchado a mi alma, a mi mente y a mi corazón. Y mi yo interior me ha dado una respuesta, ha sido en un segundo, mi cuerpo ha reaccionado. He tardado 18 días en sentir lo que siento ahora mismo.

SEGURIDAD

No una falsa seguridad en obtener lo que deseo. No. Seguridad en lo que voy a hacer. Seguridad en lo que quiero. Seguridad en mi persona sea cual sea el devenir de los hechos.

Y FELICIDAD.

Tengo una sonrisa de boba ahora mismo. Nada ni nadie me la va a borrar.

99 a 1 que voy a ganar al apostar todo al infinito. Es mi número. Y no tiene color.