domingo, 16 de junio de 2013

querida yo a los 16 años


Querida yo a los 16 años:

Se abre ante ti el último curso de Bachillerato, en el cual sufrirás enormemente por amor; pero tranquila en primero de carrera le olvidarás. Los estudios los llevarás cómo siempre, estupendamente bien. Desde aquí te aviso que existirán injusticias con las notas para Selectividad, que haber manifestado que tu deseo es estudiar Biología tan sólo te repercutirá negativamente, te colocarán en el cajón de los que estudian carreras inútiles. Pero te cobrarás tu triunfo. En Selectividad bordarás el examen y se notará a quien han inflado la nota y a quien no.

Pasarás el mejor verano de tu vida. Esperando la Universidad, creciendo y convirtiéndote poco a poco en adulta. Una madurez que tardará en llegar infinidad de años… pero tranquila que llegará. Yo aún la espero. 

Biología al principio no será cómo crees, será duro y difícil aunque te aviso que estarás siempre muy satisfecha por la elección. Ha ganado la batalla el corazón y los sentimientos, no el sentido común. Y has de saber que aunque te arrepientas en una o dos ocasiones, eso va a terminar pasando. No te agobies. Son momentos de crisis .

A mamá le van a detectar un cáncer de mama. Pero se curará y hoy, 8 años después de su diagnóstico está sana. La abuela se irá y la echarás tantísimo de menos que no crees que sea posible que nada te arranque una nueva sonrisa. Y de nuevo te equivocarás, vendrá otra personita llamada Nicolás. Sí, vas a tener un sobrino. Es el amor más grande que nunca podrás experimentar. Y este sí es para toda la vida.

En Biología harás amigos para toda la vida. Y vivirás la experiencia compartiendo facultad con tus mejores amigos del colegio. ¿Qué más puedes pedir? Estudiarás lo que amas, tendrás caras sonrientes en cada día de facultad, viajarás siempre que puedas, saldrás muchísimo de fiesta, soñarás acompañada... 

Vas a fumar, y a beber. Y a probar los porros y las setas y el pastel de maría. Ahora mismo te parecerá una locura, con lo sana que eres tú. Y el tabaco de momento aún te acompaña. No te agobies, tienes un amor loco con él, lo dejas y vuelves en infinidad de momentos. Ahora... te advierto que ya lo dejaremos del mismo modo que dejarás tantas cosas tóxicas en tu vida. Cuando sea el momento.

Vas a enamorarte de un ex-jesuítico. Aunque con él no te plantearás lo que es el amor. Será un enamoramiento que te va a parecer que te sobrepasa, que no puedes controlar. Y no lo vas a controlar. Le vas a perder. Y sufrirás muchísimo... tranquila que aún sufrirás más en el futuro. El corazón se romperá y te escudarás en un conocido (un año después) para sobrellevar este desamor.

Tendrás tu primera relación seria. Y no hace falta que yo te avise, que aunque suene con maldad, vas a creerte tus propias mentiras de que le amas. No. Tan sólo le quieres porque es una persona maravillosa y buena. Y te trata como una princesa. Y te ayudará tantísimo que no sabrás cómo cortar esa situación. Tardarás muchos meses en tomar la decisión, no por pereza ni por miedo sino porque no quieres destrozarle el corazón.

Se lo destrozarás. Es inevitable. Pero será porque aparecerá en tu vida el ser humano más excepcional que nunca antes hayas conocido. Al final no poder pasar al segundo ciclo (sí, serás una mala estudiante y no tendrás los créditos suficientes para pasar a 4º) y tener que hacerlo un año después tendrá un motivo o una recompensa. El amor. 

Te vas a enamorar locamente de un chico manchego. De un cantante! Aprenderás a amar la música, pero tarde. cuando él ya se haya ido de tu lado. Creerás que es el amor de tu vida (y lo será, durante muchos años, hasta que comprendas que no puede ser el amor de tu vida si se marcha). Incluso os prometeréis y tendréis una vida en común. Le ayudarás a conseguir su sueño de ser embriólogo. Lucharéis juntos frente a todo, pero cuando fallezca su padre se alejará de ti para siempre. Te aviso desde aquí que te va a abandonar. Se irá de tu lado tras 3 años sin ninguna explicación, tan sólo aludiendo a la incompatibilidad. Y no lo entenderás. Quiero que sepas que creerás que se acaba el mundo, que nada tiene ni tendrá sentido. Y dolerá. No existe remedio ni tengo ninguna palabra de consuelo. Tan sólo puedo decir que el tiempo pasará y el dolor se diluirá. No va  a desaparecer del todo ni aún después de dos años. No quiero pintarte el mundo de color de rosa cuando no lo es. Quiero avisarte de que una vez más te repondrás frente a la vida. Y ese es el mayor logro.

La investigación no ha dado sus resultados. Tomarás la decisión de abandonar una tesis doctoral en Bioquímica y te puede parecer una locura, pero sin beca serán años de lloros y de lágrimas. Hazme caso, tomarás una buena decisión. Además empezarás una segunda carrera. Serás doblemente licenciada gracias a ese cambio. No es una tesis pero si es el camino a una felicidad diferente.

Cuando creas que tu mundo va a desmoronarse por haberte quedado sin tu mejor amigo y sin el amor de tu vida al mismo tiempo, sin tesis y con tus amigos desperdigados por media España… tomarás una decisión que te colocará a 1000km de casa. En Oviedo. Dónde vivirás unas experiencias vitales tan maravillosas y fantásticas que ahora, desde el futuro, tan sólo puedo decirte que cada segundo de tu vida que te va a llevar a Oviedo va a merecer la pena

¡¡Sorpresa!! Estudiarás el BIR siendo cómo es desde 1º de carrera tu última opción. A la primera no lo lograrás. Ahora estamos en la segunda. Cruzando los dedos porque salga la especialidad del Genética (hay un proyecto de ley). Sentirás que la vida te está regalando la oportunidad de conseguir de verdad tu sueño: Investigación Clínica en enfermedades genéticas. 

Sí. Créeme! A nadie cómo a ti te va a cambiar tanto esta experiencia. Vas a descubrir y redescubrir infinidad de sentimientos, de deseos, de pasiones. Conocerás a personas que de verdad merecen la pena. Y compartirás tu vida con un hombre (lo es, tiene 33 años! Nunca te gustaron los chicos mayores pero ahora 7 años no te parecen tantos), que aunque lo conocerás al principio de tu estancia allí no será hasta después de muchos errores (masculinos y para con él) y oportunidades perdidas cuando tomes la decisión de ir a por todas con él. Y ya han pasado 5 meses desde que forma parte de tu día a día, ahora en la distancia porque has vuelto a casa, y sin saber si es o no es ese amor que esperas. Pero con el que has decidido que mientras llega ese verdadero amor de tu vida puedes disfrutar del tiempo de calidad que te ofrece. Ese tiempo que tanto cuesta obtener y del que nunca quieres desprenderte. Quizá sea el amor de tu vida o quizá no. Pero lo infinitamente feliz que eres ahora mismo con una relación no convencional vale de sobra.

Ahora mismo me hallo en la misma tesitura que tú, sin saber nada más de mi futuro. Ojala viniera mi yo de 36 años a decirme que sucederá en la próxima década. A relajarme y tranquilizarme. A advertirme de que la vida merece ser vivida del modo en el cuál la estoy viviendo.

Han pasado 10 años desde dónde estás ahora mismo, tu momento. Ha pasado una década desde mis 16. Vive la vida cómo la sientas. Tan sólo tomando las decisiones que te hagan feliz, no las correctas, porque a fin de cuentas los convencionalismos no son para ti. Y la corrección aunque ahora te parezca esencial y básica en tu vida, no lo es en absoluto. La felicidad en cambio sí que lo es. Tardarás en aprenderlo, te aviso. Pero no me hagas caso, así tomarás las decisiones poco a poco al principio y te llevarás la misma sorpresa que me llevé yo el día que empecé a decidir con la felicidad como meta.

No te sacarás el carnet de coche, te harás 4 tatuajes y la lista créeme va a seguir creciendo, te vas a dilatar las orejas, cortarte el pelo de mil maneras y cambiar tu look otras tantas. Escribirás, escribirás y escribirás. Llorarás, soñarás y sufrirás. Pero va a llegar un momento en el cual estarás estupenda, por dentro y por fuera. Y te querrás cómo nunca te quisiste. Eso también va a merecer la pena.

El camino está siendo más largo del que esperas. No tendrás esa tesis doctoral con la que sueñas leer a los 27 años, no te habrás podido independizar definitivamente (tan sólo lo harás en dos ocasiones y con vuelta al hogar) ni tampoco tendrás la vida de cuento que esperas ahora mismo. Pero... tranquila! Sufrirás (y yo sufro aún) un camino arduo y difícil con una recompensa. Y si esa recompensa es la experiencia vital que vas a tener (y tendremos) te aseguro que merece la pena el camino. 

Querida yo a los 16 sólo tenemos un corazón. Y hay que serle fiel. Toma todas las decisiones con una dosis de cabeza pero con infinitas dosis de amor, impulso, intuición, alegría, ganas de vivir, ilusión… jamás te arrepentirás de ninguna decisión que tomes si lo haces de este modo. Te lo digo yo desde el futuro.

Te quiere tu yo orgullosa de 26 años.